Doña Petronila y sus flores de amor y vida
A sus 93 años, doña Petronila Fernández es una mujer fuerte y con mucha energía para ganar su «dinerito» por sí misma.
Crecida en un rancho de Tizimín, sacó adelante sola a sus hijos. Fue partera, cocinera y mucho más, todo para que a sus hijos no les faltara pan en la mesa.
Hoy rodeada del amor de sus hijos y nietos no quiere ser una carga para ellos, por eso se dedica a elaborar hermosas flores de papel crepé.
Con esta actividad doña Petronila se ayuda y se mantiene feliz porque dice que es un arte perdido que ella está recuperando.
También hace bordados para manteles, pero de eso ya muy poco y por encargos, porque se le cansa la vista.
Su nieta Marva Olivares González la ayuda con la venta de flores publicando en redes sociales.
«Pueden hacer sus pedidos para adornar sus bellísimos altares el 12 de diciembre o inclusive para este 1 y 2 de noviembre», asegura la joven.
«Mi abuelita está muy contenta haciendo esto, porque rescata una tradición que se va perdiendo, ahora nos vamos por las cosas rápidas, sin amor», explica. «En cambio lo que hace mi abuelita tiene mucho amor y esmero».
Sin duda cada flor que hace doña Petronila representa la historia de amor, esmero y sacrificio con el que sacó adelante a sus hijos.
Las flores se venden con los siguientes precios:
$15 cada flor
$80 la media docena
$150 la docena.
Pueden ser del color y diseño que el cliente guste, con o sin escarcha.
Pedidos al 9994 410 392, con Marva Olivares.
