Yucatán, con gobernador progresista, pero con un congreso retrógrada, denuncia la comunidad LBGT+
Tan retrógradas como los anteriores diputados resultaron los actuales legisladores estatales, que con veinte mil pretextos dan largas a que se concrete en Yucatán el matrimonio igualitario, a pesar de que se aprobó desde agosto del año pasado, denuncian activistas de la comunidad LBGT+.
Hasta ahora no se han actualizado las leyes secundarias del matrimonio igualitario, en medio de un “tortuguismo” que impide la unión civil entre personas del mismo sexo.
Actualmente el Congreso del Estado está controlado por panistas, que no son proclives al matrimonio igualitario por sus principios doctrinarios, aseguran los activistas.
A seis meses de que la anterior legislatura aprobó la reforma a la Constitución Política Local, colectivos por la protección de los derechos de las comunidades LGBT+ advierten que en marzo vence el plazo para aprobar las leyes secundarias, pues actualmente las parejas del mismo sexo no pueden casarse, a menos que hayan tramitado un amparo, el cual representa un alto costo económico y demora mucho tiempo.
Ante estas reclamaciones, el presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso, Víctor Hugo Lozano Poveda, salió prácticamente a regañar a los activistas que presionan al Poder Legislativo.
«Es un funcionario gris, un simple burócrata que no tiene iniciativa, es lamentable que tengamos un gobernador progresista, pero un presidente del Congreso retrógrada», lamentan los activistas.
