Piden sustituir el henequén por el cultivo de cáñamo, el nuevo oro verde de Yucatán
MÉRIDA, Yucatán.- Guillermo Artiachi Vázquez, presidente de Cannasur (Asociación Cannábica del Sureste), no tiene la menor duda del potencial económico de la producción de cáñamo y cannabis en Yucatán, a tal grado que lo consideró el nuevo oro verde de Yucatán.
Incluso pidió que el cultivo de cáñamo sustituya las siembras de henequén para que los productores del campo retomen la riqueza del campo yucateco, pero ahora en sus manos, a diferencia del Sisal, que se quedó en poder de los hacendados que hicieron fabulosas fortunas a costa de los campesinos.
Guillermo Artiachi, junto con otros integrantes de Cannasur, el senador Jorge Carlos Ramírez Marín y médicos que ya recetan medicina a base de cannabis, participaron en el precongreso «Medicina y Agroindustria del Cáñamo de Mérida», que se celebró en Enter Work el sábado pasado.
Este ciclo de charlas, que abarcó también la parte legal del cultivo, industrialización y comercialización del producto, es un avance del Congreso de Medicina y Agroindustria del Cáñamo a celebrarse en Mérida en el 2023.
En su intervención, el senador Ramírez Marín informó del estatus legislativo que guarda la legalización de cannabis para uso agroindustrial, medicinal y lúdico.
«Lamentablemente, por cuestiones meramente electorales, el partido que tiene la mayoría tanto en la Cámara de Diputados como de Senadores, no quiere avanzar más en el tema, lo mismo que el presidente López Obrador, pues no quieren que los señalen como aquellos que legalizaron la marihuana, y eso tenga un costo en las urnas para ellos», expuso Ramírez Marín.
Los doctores Mirna Flores Meza y José Paul Martínez Sanders, promotores del uso medicinal de Cannabis, expusieron el marco teórico y sus experiencias en el uso de marihuana en la parte de salud.
La doctora Flores reconoció que el campo es muy amplio, pero aún tiene mucho que trabajarse sobre todo en la parte social y cultural, pues ningún médico quiere que lo tilden de «marihuano» por recetar medicina cannábica.
El doctor Martínez Sanders, promotor del uso medicinal de Cannabis en Sonora, expuso que el cuerpo, sin necesidad del consumo de marihuana, produce por sí mismo cannabinoides que le generan un estado de bienestar, de ahí la facilidad con la que el organismo humano se adapta a la medicina cannábica.
Igual reconoció que aún falta mucho por avanzar para que los médicos comiencen a internarse en este tema y puedan recetar medicina cannábica.
Ambos especialistas precisaron que se trata de medicina, no de suplementos o productos «milagro». Es medicina que recetan profesionales de la salud.
En el tema legal, Guillermo Ramírez Granados, presidente del Consejo Mexicano de Comercio Exterior, Inversión y Tecnología Región Península, habló sobre la exportación e importación de cáñamo.
El joven abogado reconoció que por tratarse de un producto que ha estado proscrito por 100 años, su regulación será muy estricta, mucho más que para otros productos de importación y exportación.
Por su parte, el ingeniero Radamés Artiachi Vázquez, vicepresidente de Cannasur, habló de la importancia económica del cáñamo, que en los países donde ya es legal su cultivo y aprovechamiento deja una importante derrama económica, la cual ya impacta en el producto interno bruto (PIB) de esas naciones.
Lamentó que ante la duda de los legisladores por aprobar su legalización, México está dejando pasar la oportunidad de producir riqueza, y cuando lo haga otros países como Estados Unidos, Canadá, incluso Colombia, ya van a tener avanzado un buen tramo del camino.
Al precongreso asistieron ejidatarios y productores aliados de Cannasur y otros que solo están esperando la legalización para que en sus tierras comience a cultivarse el nuevo oro verde de Yucatán.