Renán Barrera inaugura la escultura “Lo que dejamos pasar” en la glorieta de The Harbor
La escultura del artista William Gaber está a la vista de los conductores que transitan por la salida a Progreso.
MÉRIDA, Yucatán.- Los espacios públicos de Mérida cuentan con sitios como glorietas, parques, explanadas, calles o avenidas, mismos que representan el escenario idóneo de la expresión de la vida urbana, manifestó el Alcalde Renán Barrera Concha en la inauguración de la escultura “Lo que dejamos pasar” del artista William Gaber.
En el evento, que se realizó en la glorieta de The Harbor, el Presidente Municipal estuvo acompañado del artista William Gaber Erosa, del Socio Fundador y CEO de Inmobilia, Roberto Kelleher Vales, la Regidora Presidenta de la Comisión de Cultura y Espectáculos, Alice Patrón Correa, y la directora de MCV Arte Contemporáneo, Mimi Cervera Villamil.
Recordó que el pasado 28 de marzo el Cabildo autorizó la recepción de esta escultura en donación, la cual no representó un costo para la ciudad, debido a que la empresa Inmobilia aportó recursos para los trabajos en las áreas verdes y la obra artística.
“La fisonomía de Mérida ha ido cambiando en busca de mejorar la calidad estética y visual del paisaje urbano para el disfrute de las y los ciudadanos, con el embellecimiento de la ciudad a través de intervenciones y acciones artísticas en el espacio público”, dijo.
Destacó que Mérida es reconocida a nivel nacional e internacional por sus artistas y la cultura ciudadana, lo cual logró que la ciudad sea nombrada Capital Americana de Cultura en 2000 y 2017, así como cuenta con la Carta de los Derechos Culturales.
Mérida es bonita y disfrutable, abundó, cuenta con la creatividad de sus artistas donde su arte tiene que estar en el espacio público, a donde pertenece y es cuidado por todas y todos dando muestra de ser una ciudad con desarrollo humano y reconocida también por esa cultura ciudadana que nos distingue en México.
Finalmente, la obra conformada por tres cuadros de gran formato pintada de color un intenso color amarillo, está hecha de lámina de acero y pintura automotriz de 280 x 500 x 50 cm, que procura evocar las celosías de las antiguas casas de Mérida.