Inminente renuncia del Fiscal Anticorrupción de Yucatán: ‘vendía’ protección a corruptos
Aunque tenía oportunidad de ser ratificado, José Enrique Goff Aillud no lo hará ante las numerosas quejas en su contra y su bajo desempeño.
MÉRIDA, Yucatán.- Debido a su ineficiente desempeño, el fiscal anticorrupción de Yucatán, José Enrique Goff Ailloud, presentará hoy su renuncia al cargo, en medio de acusaciones de haber creado, junto con su círculo más cercano, una mafia que protegía a funcionarios denunciados por corruptos.
Aunque tenía la oportunidad de ser ratificado por un periodo más en la Fiscalía Especializada en el Combate a la Corrupción, Goff Ailloud no lo hará ante las quejas de numerosos denunciantes que veían inclinarse la balanzas de sus casos a favor de los acusados.
De acuerdo con un análisis de sus desempeño, pueden contarse con los dedos de una mano los casos en los que los expedientes se les dio seguimiento y llegaron a los juzgados.
Uno de los más sonados casos de protección a funcionarios corruptos fue el de una denuncia que interpuso un empresario de Progreso contra el alcalde Julián Zacarías Curi y otros funcionarios municipales, por pretender apropiarse de una marina.
En un acto de favoritismo hacia el alcalde de Progreso, la Fiscalía Especializada en el Combate a la Corrupción decretó el no ejercicio de la acción penal en la denuncia que interpuso Manuel Jesús Cáceres Romero contra el presidente municipal y su director de Desarrollo Urbano, Luis Alberto Castro Naal, por otorgar un permiso ilegal de construcción a personas que no tienen la concesión de la marina Servicios Marítimos de Progreso.
Pese a que el denunciante presentó todas las pruebas para comprobar que es suya la propiedad, tanto el director de Investigación y Control de Procesos como el fiscal en jefe adscrito a la mesa de la Unidad de Investigación y Litigación Especializada en el Combate a la Corrupción, Wilbert Yam Viana y Emmanuel Quintanilla Sánchez, respectivamente, operaron a favor de Zacarías Curi, a quien ni siquiera citaron a declarar, «para no molestarlo».