Lo que faltaba: la 4T Yucatán quiere sumar a sus filas al más chantajista hijo de papi
Pablo Gamboa Miner, hijo del corrupto más grande de México, Emilio Gamboa Patrón, se reúne con Joaquín Díaz Mena, quien no se cansa de recoger desechos políticos en su camino al 2024.
MÉRIDA, Yucatán.- Circula en redes sociales lo que será la nueva adquisición de la 4T Yucatán, nada más y nada menos que Pablo Gamboa Miner, un «nini» chantajista, un hijo de papi que sin merecimiento ha recibido de todos, pero ya le llegó la hora de pagar.
Su padre, Emilio Gamboa Patrón, representa toda la corrupción del país, y quiere que su hijo continúe con ese título, ahora en la 4T.
En redes sociales circula una foto Gamboa Miner reunido con Joaquín Díaz Mena, precandidato de Morena a la gubernatura de Yucatán, quien ha sumado a su campaña los peores desechos del PAN y el PRI, incluso ivonistas tan corruptos como Luis Hevia Jiménez, Gabriela López, Marcos Celis Quintal y Pablo Castro.
Lo mínimo que merece Gamboa Miner es que lo expulsen del PRI por el traidor. Sus oscuras intenciones son llegar al Congreso de la Unión para luego «voltearse» hacia la 4T, ya sea el Verde o Morena.
El encuentro con Díaz Mena es solo parte de su chantaje. Le apuesta a que esa foto que circula en redes sociales le permita negociar una posición en el Senado, pero todo indica que será lo contrario, pues le servirá al PRI para deshacerse de un hijo de papi que no suma, que ya no aporta nada al tricolor, más que desprestigio.
Gamboa Miner es una suma que resta, es un alfil de Jorge Carlos Ramírez Marín para tratar de desestabilizar al PRI, tal como hicieron hace unas semanas operadores del senador traidor que trataron de boicotear la reunión en la que presentaron el programa Identidad Priista en la Casa del Pueblo.
Si finalmente Gamboa Miner se va el PRI no pierde nada, al contrario se sacude de uno de sus lastres más pesados, de esos que deben estar en el basurero de la historia por todo el daño que le han hecho a Yucatán y al país.