Defensores del territorio indígena piden que cesen ataques por oponerse al tren maya
La Asamblea Defensores del Territorio Maya Muuch’ Xíibal nos comparte la carta abierta que dirige al presidente Andrés Manuel López Obrador, en respuesta a lo que llaman ataques verbales de «sus empleados del sector turismo’:
YUCATAN, A 21 DE NOVIEMBRE DE 2021
Sr. Andrés Manuel López Obrador, presidente de los Estados Unidos Mexicanos:
La Asamblea de Defensores del Territorio Maya Múuch’ Xíinbal es una organización de comunidades que caminamos juntas con el objetivo de defender nuestro territorio contra los megaproyectos empresariales que buscan despojarnos de lo que aún nos pertenece como pueblo Maya. La Asamblea ha recurrido a la defensa legal de su territorio y sus derechos con los mecanismos y herramientas que la misma ley y el sistema de justicia nos otorga.
En este sentido, señor Presidente, hemos solicitado la protección del Amparo y hemos pedido a la CNDH y a la CIDH la adopción de medidas cautelares debido a la campaña de imposición del proyecto mal llamado “tren maya” y a la presión, la descalificación y el amedrentamiento que a diario ejerce el gobierno federal en distintos niveles.
Más de un centenar de defensoras y defensores de los derechos humanos e indígenas han sido asesinados en México en este sexenio, señor Presidente, debido en gran parte al ambiente hostil que han generado –y siguen generando– Usted y su gobierno. En nuestro caso, quienes más se han empeñado en denostarnos, agredirnos e intentar lincharnos y criminalizarnos públicamente son el director del FONATUR, Rogelio Jiménez Pons, y el secretario federal de Turismo, Miguel Torruco Marqués, quienes –como Usted ha de saber, señor Presidente– han seguido sus instrucciones y nos han acusado reiteradamente de participar en un “complot de la ultraderecha” y de ser parte de un “cártel de ampareros” contra el proyecto del mal llamado “tren maya”.
Jiménez Pons y Torruco Marqués han seguido el mismo guión racista que Usted, señor Presidente, ha implementado en otros ámbitos. Famoso y triste es el caso de los niños mexicanos con cáncer y sin medicinas, a quienes el infame subsecretario de Salud, Hugo López Gatell, acusó también de ser parte de “un complot de la ultraderecha” por haber exigido a su gobierno un trato digno y humanitario. No son casos aislados, señor Presidente: están conectados a Usted y de Usted emanan. Jiménez, Torruco y López Gatell son sólo apéndices suyos.
México preside hoy el Consejo de Seguridad de la ONU, y el discurso que ha esgrimido nuestra representación versa sobre la necesidad de un mundo más justo. Que contradicción y qué incoherencia, señor Presidente: El gran farol de la calle no alumbra la oscuridad en casa. México levanta la voz con brío justiciero en los foros internacionales, mientras en suelo patrio el Presidente deja sueltos a sus sicarios para menospreciar, discriminar, atropellar, insultar y despojar a los pueblos originarios de sus derechos.
“Nos hacen los mandados” dijo con soberbia el sicario de Turismo, Miguel Torruco, hace unos días en Yucatán, y sin freno ni vergüenza siguió de lengua suelta y nos acusó –en la tierra donde nació el Juicio de Amparo– de pertenecer a un “cártel de ampareros” (sic), como si recurrir a la ley, señor Presidente, constituyera un delito.
A los pueblos originarios nos han llamado de muchas maneras a lo largo de tantos siglos de opresión, pero sólo sus sicarios de la 4T, señor Presidente, han tenido el desvarío y el descaro de tildarnos –en un alarde de imaginación criminal retorcida– de “ultraderecha” y de formar parte de un “cártel de ampareros” (sic). ¿Qué sigue después, señor Presidente? ¿Ya tocaron fondo sus sicarios de Turismo o qué otras ofensas, insultos y mentiras se les ocurrirán? ¿Hasta cuándo va a continuar financiando la 4T –con dinero público– estos atropellos y esta campaña de agresión y desprestigio en nuestra contra?
Por lo anterior, señor presidente López, la Asamblea de Defensores del Territorio Maya Múuch’ Xíinbal le comunica lo siguiente:
1.- Lo acusamos a Usted y a su gobierno de racistas y promotores de la violencia contra los indígenas. Los insultos y las ofensas del director del FONATUR y del secretario de Turismo son una pequeña muestra de la propensión a la agresión, la mentira, la simulación y la mala fe del gobierno federal para con los pueblos originarios.
2.- Como hemos señalado antes y como Usted bien sabe, existe una complicidad inaudita y descarada entre su gobierno y varios organismos de la ONU para violar y atropellar nuestros derechos de pueblo originario. En especial hemos señalado al Programa de las Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos (ONU-HABITAT); a la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS, por sus siglas en Inglés), que ha estado involucrada también en el desabasto de medicinas del Sector Salud, en especial para los niños con cáncer; a la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO, por sus siglas en Inglés) y a la Organización Mundial del Turismo (OMT). Al respecto le hemos enviado dos cartas abiertas al Sr. António Guterres, secretario general de la ONU, informándole sobre lo evidente.
3.- Lo responsabilizamos a Usted como presidente de la República, Sr. Andrés Manuel López Obrador, y a sus patéticos subordinados del Sector Turismo (en especial a los titulares del FONATUR y la SECTUR, Sres. Rogelio Jiménez Pons y Miguel Torruco Marqués), de cualquier amenaza, percance o daño físico que pudiera ocurrirle a cualquier integrante de la Asamblea de Defensores del Territorio Maya Múuch’ Xíinbal, pues otra vez sus declaraciones nos ponen –con toda intención criminal– en una situación vulnerable.
Por último: Exigimos la cancelación del mal llamado “Tren Maya” porque es un proyecto mal concebido, mal diseñado, mal ejecutado –técnica, política, socialmente–, corrupto, corruptor y transgresor de los convenios internacionales contra el etnocidio. Las pruebas sobran.
Por la Asamblea de Defensores del Territorio Maya Múuch’ Xíinbal:
Anahí Haizel de la Cruz Martín.