En Yucatán no hay magistrade, pero sí un magistrado golpeador de mujeres
-Dos pesas y dos medidas: el Consejo de la Judicatura no ratifica a un juez, pero sí permite tener entre sus integrantes a un golpeador, pese a la Ley 3 de 3 contra la violencia a las mujeres.
MÉRIDA, Yucatán.- En una muestra de que en Yucatán la justicia aplica dos pesas y dos medidas, el Consejo de la Judicatura no ratificó al juez Rómulo Antonio Bonilla Castañeda, pero sí permite que uno de sus integrantes, el magistrado Armando Mendoza Casanova, ocupe el puesto pese a que se lo prohíbe la Ley 3 de 3, por estar acusado de golpear y maltratar de diversas formas a sus ex esposas.
Contra el juez Bonilla Castañeda se desató una campaña de desprestigio, pero todo se quedaba en palabras. En el caso de Mendoza Casanova, hay denuncias de por medio. Incluso hay duros señalamientos de activistas de la Agenda de las Mujeres para la Igualdad Sustantiva en Yucatán (Amisy) y la Observatoria Ciudadana, ambas promoventes de la iniciativa conocida como Ley 3 de 3 contra la violencia a las mujeres.
De nada sirvieron las advertencias de las defensoras de los derechos de las mujeres, pues el 1 de agosto Mendoza Casanova asumió como magistrado en el Consejo General de la Judicatura.
Las activistas lamentaron que pasó de ser juez golpeador a consejero golpeador. Sobre Mendoza Casanova pesan dos denuncias de maltrato que interpusieron sus ex esposas, a quienes golpeaba y maltraba mediante diversas formas de violencia.
La Amisy y la Observatoria Ciudadana entregaron un escrito en el Poder Judicial del Estado para que Mendoza Casanova no se integre a la Judicatura, pues sus antecedentes se lo impiden, en cumplimiento de la Ley 3 de 3 contra la violencia que establece que violentadores de mujeres no pueden ocupar cargos públicos.
El Congreso del Estado aprobó en el 2022 esta ley y a ella se adhirieron 96 cabildos, con lo cual ya tiene rango constitucional, pero nada de esto le importó al Poder Judicial y le tomó protesta a Mendoza Casanova para que se convierta en magistrado de la Judicatura.
Esa misma Judicatura fue la que determinó no ratificar al juez Bonilla Castañeda, a quien les urgía sacarlo para poner en ese puesto a un favorito de los magistrados.
El juez Bonilla les estorbaba para su fines y se aprovecharon de los dichos de personajes inconformes con las decisiones de la justicia para quitarlo del camino.
Dos pesas y dos medidas de la justicia en Yucatán, donde los golpeadores pueden pasarse por el arco del triunfo la Ley 3 de 3 si son amigos de los poderosos.