Morenistas de nuevo le recuerdan a Rommel que es un traidor y nunca será uno de ellos
Durante su registro como precandidato a la alcaldía de Mérida, le exhiben pancartas de repudio. La respuesta de su equipo fue la agresión contra los morenistas inconformes.
MÉRIDA, Yucatán.- «Nunca será un verdadero morenista», «Rommel traicionó a la patria» y «Rommel traidor» se leía en las pancartas que exhibieron morenistas contra Rommel Pacheco, quien hoy se inscribió como aspirante de Morena a la alcaldía de Mérida.
Los morenistas dijeron que se oponen a Rommel Pacheco por traidor y por ser el candidato de la cúpula de Morena Yucatán.
El equipo de comunicación de Rommel e Irak Green Marrufo agredieron a estos militantes que demostraron su honestidad valiente, al levantar las pancartas en medio del discurso del ex panista.
Los jovenes sostuvieron sus pancartas durante varios minutos hasta que los detectaron y enviaron al equipo de comunicación y al hermano de Rommel Pacheco a reprimirlos. Mientras esto ocurría el presentador comenzó a gritar «unidad», «unidad», pero la unidad está lejos de Morena.
Al mitin no llegaron ninguno de los aspirantes a la gubernatura, si siquiera el ganador de la contienda y hoy precandidato, Joaquín Díaz Mena. También fueron ausencias notorias las de Alpha Tavera Escalante, recién incorporada a la dirigencia de Morena, y la de Verónica Camino Farjat.
Quien sí estuvo fue el senador Jorge Carlos Ramírez Marín acompañado de sus incondicionales. Su estructura fue en parte la que movió la gente que estuvo ahí. La otra parte la movieron los consejeros de Morena afines a Díaz Mena, así como las agrupaciones SUMA y Unidos.
Al concluir el evento, los organizadores quedaron nerviosos por las protestas, incluso pensaban sacar custodiado a Rommel para que no lo volvieran a increpar los morenistas.
También avanzó custodiado por su equipo durante el trayecto de la calle 69 con 40 hasta la sede morenista, en la 69 con 46. Incluso estaba planeada la visita a una casa en la que Rommel Pacheco saludó a una familia.
Es un aspirante a la alcaldía encapsulado, por temor a que los meridanos lo increpen y le recuerden sus traiciones. Es un candidato con miedo a estar entre la gente real, es un candidato de la cúpula, es un candidato moralmente derrotado.